viernes, 5 de febrero de 2010

Ens, entis / La (a veces) absurda arqueología lingüística

Últimamente me han llegado bien por mail bien a través del facebook unos pseudomanifiestos, de una pedantería insoportable, en contra del uso de la palabra "presidenta", así, en femenino. La argumentación es, por si no la han leído, la siguiente:
En castellano existen los participios activos como derivado de los tiempos verbales. El participio activo del verbo atacar es "atacante"; el de salir es "saliente"; el de cantar es "cantante" y el de existir, "existente". ¿Cuál es el del verbo ser? Es "el ente", que significa "el que tiene entidad", en definitiva "el que es". Por ello, cuando queremos nombrar a la persona que denota capacidad de ejercer la acción que expresa el verbo, se añade a este la terminación "-nte". Así, al que preside, se le llama "presidente" y nunca "presidenta", independientemente del género (masculino o femenino) del que realiza la acción. De manera análoga, se dice "capilla ardiente", no "ardienta"; se dice "estudiante", no "estudianta"; se dice "independiente" y no "independienta"; "paciente", no "pacienta"; "dirigente", no dirigenta"; "residente", o "residenta". Y ahora, la pregunta del millón: nuestros políticos y muchos periodistas (hombres y mujeres, que los hombres que ejercen el periodismo no son "periodistos"), ¿hacen mal uso de la lengua por motivos ideológicos o por ignorancia de la Gramática de la Lengua Española? Creo que por las dos razones. Es más, creo que la ignorancia les lleva a aplicar patrones ideológicos y la misma aplicación automática de esos patrones ideológicos los hace más ignorantes (a ellos y a sus seguidores).
No me gustan las cadenas de correos electrónicos (suelo eliminarlas) pero, por una vez, os propongo que paséis el mensaje a vuestros amigos y conocidos, en la esperanza de que llegue finalmente a esos ignorantes semovientes (no "ignorantas semovientas", aunque ocupen carteras ministeriales).
Lamento haber aguado la fiesta a un grupo de hombres que se habían asociado en defensa del género y que habían firmado un manifiesto. Algunos de los firmantes eran: el dentisto, el poeto, el sindicalisto, el pediatro, el pianisto, el golfisto, el arreglisto, el funambulisto, el proyectisto, el turisto, el contratisto, el paisajisto, el taxisto, el artisto, el periodisto, el violinisto, el taxidermisto, el telefonisto, el masajisto, el gasisto, el trompetisto, el violinisto, el maquinisto, el electricisto, el oculisto, el policío del esquino y, sobre todo, ¡el machisto!
Bueno, pues si no se han cansado de leer tanta tontería, ahí va mi respuesta:

1) Primero, que hay que saber leer entre líneas, y que ya desde la primera se ve que detrás de este texto hay una mente lingüísticamente conservadora. En vez de "español", usa el término "castellano", lo cual es totalmente lícito, pero denota un posicionamiento. Castellano y español son sinónimos, pero no podemos olvidar que "castellano" es más reduccionista, frente a un "español" más amplio y que tiene como reflejo ese único término "Spanish" del inglés. 
2) Que estoy de acuerdo en que lo de "miembra" es absurdo (sé que por ahí van los tiros), o por lo menos lo es a día de hoy.
3) Que lo del participio presente es verdad, pero sólo en latín. El uso invariable de estas formas en el español actual sólo se da cuando funcionan como adjetivos, y no cuando se sustantivan. El autor de este texto mezcla usos adjetivales y sustantivados en la turmix, y se fija más en la prehistoria de la lengua (ese latín tan bonito pero gracias a dios, no intocable) que en los usos actuales de una lengua que está viva.
4) Que estos participios presentes sólo tenían entidad como tal en latín. En español son adjetivos o, en su defecto, sustantivos. Si fueran participios se podrían formar con cualquier verbo, y la gente diría "ese es un comiente" o "un bebiente" en vez de "comilón" o "bebedor". Igual que impreso en "Rellena este impreso" es un sustantivo y no un participio, sin tener que buscarle más las cosquillas.
5) Que cuando estos restos del participio presente se usan como adjetivos, son invariables en el género, igual que otros adjetivos invariables como triste, verde o facha. Por ejemplo: El tío que ha escrito esto es un facha / La tía que ha escrito esto es una facha.
6) Que cuando son sustantivos, la realidad de la lengua viva nos demuestra que a veces no cambian en el género, pero otras sí. ¿Por qué? Pues porque a la gente le da la gana, y ya está. (Y mirad que digo la gente, no una ministra.) Las lenguas funcionan así, mal que a muchos les pese. Así, se dice presidenta y parienta (y jefa y médica y más).
7) Que hasta llegar hasta este punto no he querido mirar en el DRAE (porque por un lado suelo decir que me limpio el culo con el DRAE, pero por el otro me encanta consultarlo). Y ahí lo tienen:


8) Y busquen parienta, y jefa, y médica. Y lo encontrarán.
9) ¿Ignorantes de la Gramática Española? Ignoranta tú, japuta. Ignoranta y antigua como tú sola.
10) Y sí, ignorante es un adjetivo invariable, pero lo que es yo, me quedo tan a gusto. Me suena requetebién.


3 comentarios:

sriesco dijo...

A mí también me llegó un mail de ese tipo... Y me dio tanta rabia que le contesté al tipejo. No le conozco, pero confío en que algún día llegue a él (ya que la contestación al añadí después de su estupenda argumentación) o, por lo menos, que sirva de algo para todas esas personas que lo reenvían sin tener ni idea... Argh, me dan taaanta rabia!

eduaccion.orcasur@gmail.com dijo...

¡¡Brillante!!

(Adjetivo que significa, según el DRAE, "Admirable o sobresaliente en su línea")

Ángeles Fp dijo...

Me encanta tu blog. Me hago seguidora ya. Gracias