viernes, 19 de junio de 2009

Arrasó (y seguirá arrasando)



A Pretty Woman se le pueden echar en cara muchas cosas. Su simpleza. El absurdo de su argumento. Lo facilón del planteamiento. Vale. Es verdad. Pero ayer volvió a arrasar en su enésima emisión por la tele. ¿Por qué?

Pues porque es una peli fácil, vale, pero no mala. Es fácil, simple y hasta absurda, pero igual que lo son los cuentos de hadas, que siguen triunfando y triunfarán por los siglos de los siglos. Pretty Woman conjuga los ingredientes de esos cuentos y los de la comedia romántica más americana, y lo hace con maestría. Es una puesta al día de la Cenicienta que incluso mejora el original sin perder nada de su fuerza. Y sí, Richard Gere es un soso, pero, ¿no lo son acaso todos los príncipes azules? ¿Quién recuerda los nombres de los príncipes en La Cenicienta, o en La Bella Durmiente? Nadie. En estas historias las protagonistas de verdad son ellas. Porque no nos engañemos, la historia de La Cenicienta, o de Pretty Woman, que lo mismo da, no es una historia de amor, es una historia de superación individual, y Julia Roberts asumió el reto más que bien.

La tele ya no es lo que era. Pretty Woman nunca volverá a superar el 50% de share que tuvo en su primera emisión, allá por los noventa. Pero seguirá siendo un valor seguro de cualquier cadena que la emita. Igual que La Cenicienta seguirá siendo un valor seguro para cualquier niña a la que queramos embaucar con fantasías absurdas, pero no por ello menos efectivas.

No hay comentarios: