sábado, 10 de abril de 2010

Iglesia Católica Apostólica y Romana (y Bajuna, y Soez, y Vil)

No creo que una crisis como ésta acabe con la Iglesia Católica Apostólica y Romana, tal y como la conocemos y la hemos conocido durante siglos. Pero por soñar, que no falte. Y aun así, es curioso: dos mil años esperando que todo el entramado mafioso-barra-oscurantista del Vaticano se viniera abajo, para que ahora, la mayor crisis en décadas de la Iglesia vaya a venir de la mano de algo tan vil y tan patético como el abuso de menores. No sé, como poco, me resulta decepcionante. Que no sean las ideas y la apertura mental las que hagan tambalearse a Ratzinger y sus acólitos, sino la corrupción sexual...
Mmm, a veces, la historia, como la propia vida, tiene sus ironías. Una ironía que no me deja buen sabor de boca. Es un triste triunfo, que tiene el amargo regusto de lo vergonzoso.

1 comentario:

antonio dijo...

La liberalidad, el concepto del respetar al prójimo a pesar de sus ideas, religión o raza, parece no encontrase en tu escrito.
Totalmente de acuerdo en la crisis nimia y oscura del buen royismo actual.
Pedrastia, puta mierda verdad?